Summary: | Durante varios lustros la inversión asignada a la vivienda no ha recibido una atención prioritaria, debido, entre otras cosas, a que se ha juzgado como una inversión de escasa productividad y recuperación dirigida al estímulo de un consumo duradero, y que los recursos hacia ella canalizados restan posibilidades de crecimiento en otras áreas verdaderamente productivas de la economía. Como consecuencia de estas corrientes de opinión, las inversiones en vivienda han estado determinadas por presiones de diversa índole, sin una percepción cabal de lo que la vivienda significa como problema y como solución. Empero, esta tesis ha venido perdiendo terreno ante el reconocimiento, cada vez más claro, no sólo el deterioro observando en materia habitacional y sus serias consecuencias sociales, sino también de la profundas repercusiones positivas que tienen los programas de vivienda en variables tales como el producto interno bruto, la capacidad industrial instalada, el desarrollo regional y la ocupación
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