Abstract: | En este trabajo se analiza el patrón de movilidad urbana de personas asumido por las políticas de vialidad y transporte de los gobiernos federal, del Distrito Federal (DF) y del Estado de México, que ha oscilado entre otorgar la prioridad al transporte colectivo o al automóvil individual, y a las obras viales que lo soportan. En el largo plazo, este patrón se ha inclinado hacia el predominio del automóvil particular, siguiendo el camino de las ciudades estadounidenses, promovido por las trasnacionales automotrices y por la ideología individualista. En el actual gobierno del DF (2000-2006), a pesar de su declaratoria "de izquierda", esta preferencia ha sido evidente, llevando a su consolidación |