Resumen: | Los territorios periurbanos hortícolas (TPH) en Argentina -que adoptan la forma de cinturones verdes, oasis o valles frutihortícolas según cada región del país- se encuentran fuertemente amenazados y en continuo retroceso, al igual que las funciones sociales, ecológicas y económicas que aportan para el conjunto de la sociedad. Se están reduciendo en superficie y en número de productores, y/o relocalizando a mayores distancias de sus mercados naturales de proximidad, en zonas que pueden tener mayor fragilidad ecológica, fuera de las infraestructuras disponibles de regadío o rodeadas de producciones extensivas con monocultivo y uso intensivo de agroquímicos. En gran medida, dicho fenómeno se debe a la expansión dispersa de la frontera urbana, desvinculada de demandas habitacionales; con fines especulativos, para obtener una rentabilidad extraordinaria en el corto plazo, con perjuicios sociales por la pérdida de los espacios que afectan al competir y expulsar sistemáticamente a las unidades agropecuarias vinculadas con la producción de alimentos frescos |